El equipo español presentaba en la localidad francesa de Saint Omer, cuatro equipos: senior y sub21, masculino y femenino

El equipo senior masculino, después del logro en julio de la medalla de bronce en los World Games celebrados en Polonia estaba preparado para afrontar el Campeonato de Europa con la ambición de subir a lo más alto. El planteamiento del combinado español fue totalmente estratégico, con el objetivo de entrar en semifinales sin desgastarse mucho y sin mostrar todas sus bazas para una vez allí luchar con todas sus armas.

Después de una primera fase, habiendo quedado segunda de grupo al vencer a Rusia y a Suecia y haber perdido contra Italia, el equipo español senior pasaba a la segunda fase en un grupo compuesto por Portugal, Dinamarca y la temida Alemania. El equipo hizo los deberes ganando a Dinamarca y Portugal, lo que le permitía pasar a semifinales como segunda de grupo al perder contra Alemania.

El cruce de la semifinal les enfrentaba a Italia. Con la que habíamos perdido en el grupo de la primera fase y con la espina de haber dejado al equipo fuera de jugar finales en los últimos campeonatos… España entraba en la final para enfrentarse a la imbatible Alemania… el resultado final fue 4-2, en el único partido en competición oficial que el combinado germano perdía, se producía en una final de infarto.

El equipo senior femenino se jugó el puesto 7º a 10º el último día de competición y al perder contra Dinamarca con un ajustado 2-3 se enfrentaba a Suecia en la lucha por la 9º posición. El equipo sueco se mantuvo sólido en todo instante y el combinado español no pudo superarlo por lo que finalizaba el campeonato en 10º posición. Los chicos sub 21 tuvieron la oportunidad, en la fase de grupos, de pasar a las semifinales en un disputado partido contra la actual campeona del mundo, Inglaterra. Y al perder este partido se alejaban de los primeros puestos, obteniendo la 9º posición. Destacó también la actuación del equipo sub 21 femenino al finalizar 6º, un meritorio puesto, teniendo en cuenta que era su primera competición internacional y teniendo una media de edad de apenas 17 años.