La presidenta de la RFEV, Julia Casanueva, posando frente a la sede del CSD.

Las elecciones a la Real Federación Española de Vela acostumbran a ser un batiburrillo difícil de entender. La Ley del Deporte y la Ley Electoral que rige para las Federaciones Españolas, creada en su día por el Consejo Superior de Deportes, es muy complicada de entender, confusa y caduca. En su día se pensó para que muchos presidentes no tuvieran demasiados problemas para continuar, pero la profesionalización de los mismos en la mayoría de federaciones ha provocado que éstos no se quieran ir y se agarren al sillón más tiempo del estrictamente necesario.

La federación de vela no es una excepción y después de los ‘profesionales’ Gerardo Pombo y José Ángel Rodríguez –que costaban al ente más de 100.000 euros como poco al año-, una moción de censura puso en el poder a una desconocida y desconocedora del deporte, Julia Casanueva. Ésta señora dijo que aterrizaba para limpiar la federación y que pasado el año y pico, la moción fue el 6 de octubre de 2016, dejaría el camino libre para que llegara otro con nuevas ideas. Es por ello que la mayoría de miembros de la asamblea la votaron. Llegado el momento de irse y ‘limpiar’ la federación tal y como prometió, ha decidido romper y traicionar la palabra que dio en aquella asamblea que le había puesto la presidencia en bandeja y ahora dice que quiere seguir. Vaya, que le ha cogido gustirrinín y esto de no ser nadie y pasar a ser alguien la ha endiosado. Por cierto, sabe lo mismo de vela que cuando llegó: Nada.

Alargó el inicio del proceso electoral alegando una serie de cambios en el reglamento, y si tradicionalmente en diciembre de año olímpico ya había nuevo presidente, en esta ocasión en enero todavía no hay ni miembros a la asamblea. Por no hablar de candidatos a presidente, además de ella parece que tiene la firma intención de presentarse un hombre que sí sabe de vela, Jesús Turró. Seguro que ella no sabe ni quién es ni lo que ha hecho en su carrera profesional y deportiva, pues se lo diré, entre otras cosas ser el máximo responsable del equipo que consiguió cinco medallas (cuatro de oro y una de plata) en unos Juegos Olímpicos. El palmarés de ella como presidenta en de cero sobre cero.

Ahora como presidenta de la Junta Gestora de la RFEV, Casanueva sigue controlando el cotarro desde dentro de la casa –legal pero incongruente- y agarrándose a un sillón que no quiere soltar ni con agua caliente, vamos. Con lo bien que hubiera quedado delante de toda la vela española si hubiera cumplido con su palabra. Ella por sí misma no es nadie, solo le mantienen los satélites, día que pasa día que son menos, que tiene alrededor y que le hacen el trabajo sucio para su gloria y loanza. Pero la vela española está cansada de presidentes que solo miran para sí mismos y este caso de atrincheramiento al cargo es un ejemplo más.

La vela española no quiere más presidentes de este estilo. Solo pide que trabajen para mejorar una vela española que en lugar de modernizarse e ir a más, si sigue por estos derroteros, va a la deriva.

Piénsenlo antes de votar.

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CALENDARIO ELECTORAL DE LA RFEV
LISTADO PROV.CANDIDATOS A MIEMBROS DE LA ASAMBLEA DE LA RFEV

Jorge Rodríguez
Náutica Digital